Hay muchos malentendidos comunes en torno al arte de la recuperación de datos. Muchos clientes potenciales subestiman cuánto se puede obtener de un disco duro dañado usando las herramientas y técnicas adecuadas, mientras que otros cometen el error de asumir que han borrado sus archivos de forma permanente cuando recuperarlos sería, de hecho, algo trivial. Otros asumen equivocadamente que los métodos de almacenamiento modernos como la memoria flash son el talón de Aquiles del técnico de recuperación de datos.
Sobre todo, sin embargo, los clientes malinterpretan cuánto cuesta. Sus expectativas de precio al comienzo del trabajo varían ampliamente, y la respuesta que reciben de las empresas de recuperación de datos a veces sólo sirven para enredar las cosas –ciertos costes pueden estar ocultos, las capacidades del proveedor no han sido probadas y la cantidad de datos recuperables es desconocida.
Si te está costando entender los precios de recuperación de datos, sigue leyendo – la siguiente guía debería darte una idea de cuánto costará tu siguiente trabajo.
La primera norma de la recuperación de datos: Se paga por tiempo, no por cantidad
Lo primero que deberías saber sobre los precios de la recuperación de datos es que casi siempre se te cobrará por el tiempo que toma el trabajo, no por la cantidad de datos recuperados, y cualquier compañía que diga otra cosa debería considerarse sospechosa.
Piensa en ello: si llevas al taller un disco duro destrozado, el trabajo de recuperación será el mismo sin importar si quieres recuperar un solo archivo o varios gigabytes de datos. El trabajo real es poner el disco en funcionamiento de nuevo, no transferir parte o todos sus contenidos a un nuevo medio.
¿Qué otros costes tengo que conocer?
Si tu dispositivo de almacenamiento ha sufrido daños serios, puede que tengas que pagar más que el tiempo y experiencia de tu empresa de recuperación de datos elegida. Tal vez más importante, hay que considerar el coste de las partes.
Cuando un disco duro sufre un fallo mecánico, por ejemplo, es necesario reemplazar el componente dañado por uno que funcione de un dispositivo idéntico. Esto supone buscar un disco donante del mismo fabricante, construido en la misma planta y a la vez y con el mismo firmware. El coste sería mucho más alto que el de comprar un dispositivo nuevo o adquirir el espacio de almacenamiento equivalente.
Fuera de eso, puede que se te facture el medio en el que se devuelven tus datos, así como los costes postales y de embalaje. En KLDiscovery cobramos inicialmente por las partes, los medios de sustitución y el envío, aunque otras empresas de recuperación de datos no son tan transparentes. Haz click aquí para conocer nuestro proceso y pedir un presupuesto.
¿Habrá una tasa de diagnóstico?
Esto puede cambiar. Algunas compañías cobran por el diagnóstico, que por sí solo puede ser un proceso largo y agotador. Sin embargo, por lo general, esto depende de las exigencias del cliente y la complejidad del trabajo.
KLDiscovery casi siempre ofrecerá una evaluación inicial libre de cargos para evaluar la condición del medio y determinar qué necesitamos hacer para ganar acceso a los datos, así como qué porcentaje de los contenidos del dispositivo pensamos que podremos recuperar. Entonces nuestros clientes pueden elegir si seguir o no con el procedimiento.
Sin embargo, en algunos casos se necesita un diagnóstico más profundo. Un cliente puede pedir información explícita en cuanto a si determinado archivo puede recuperarse antes de dar luz verde al trabajo de recuperación de datos, lo que significa que la empresa tiene que mirar el dispositivo dañado más de cerca de lo que lo haría en otro caso para generar un informe de listado de archivos. Este servicio suele cobrarse.
Más aún, algunos trabajos especializados requieren que la empresa recorra un largo camino en el proceso de recuperación antes de que un diagnóstico sea posible. Recuperar archivos de un iPhone dañado es un ejemplo de ello. En estos casos puede pedirse al cliente que pague una tasa de diagnóstico.
En conclusión…
Con todo esto en mente, a la hora de ver presupuestos para un trabajo de recuperación de datos, la diferencia de precios puede ser importante. Por un lado, tienes una escala gradual en términos del trabajo necesario y, por tanto, de las horas que se facturan: las recuperaciones lógicas son rápidas y simples, mientras que las electromecánicas pueden exigir mucho más tiempo del técnico. Complica los asuntos el hecho de que algunas empresas no presupuesten inicialmente las partes, medios de reemplazo y el envío, haciendo que la factura final sea mucho más alta que el precio original.
Al elegir una empresa de recuperación de datos, asegúrate de preguntar qué te dan por tu dinero. Ten cuidado con las tarifas fijas, mira qué trabajo se incluye en tu presupuesto (evaluación, partes de reemplazo, etc.), y haz saber si hay archivos o carpetas específicos que necesitas recuperar a toda costa.